AHORRO ENERGÉTICO: ILUMINACIÓN
martes 08 noviembre 2005
La luz representa una quinta parte de la electricidad que consumimos en casa. Por este motivo es interesante analizar las necesidades de cada lugar de la vivienda ya que no necesitamos en todas partes la misma luz, ni durante el mismo tiempo, ni con la misma intensidad.
Es importante tener en cuenta que la cantidad de electricidad necesaria para producir luz (vatios) no es lo mismo que la cantidad de luz producida (lúmen).
TIPOS DE LÁMPARAS QUE PODEMOS ENCONTRAR EN LOS MERCADOS
A.- Lámparas incandescentes (bombilla convencional): Son las más económicas pero consumen más y duran menos (1.000 horas).
B.- Lámparas halógenas: Duran más que las anteriores y hacen una luz de calidad especial. Las que llevan transformador consumen hasta un 30 % menos que las bombillas convencionales.
C.- Tubos fluorescentes: Son más caros que las bombillas convencionales pero consumen hasta un 80% menos de electricidad y tienen una duración de entre 8 y 10 veces superior.
D.- Lámparas de bajo consumo: Son pequeños fluorescentes (con sus ventajas de consumo y duración) que se han adaptado a las medidas, formas y soportes para que puedan colocarse en cualquier sitio. En ubicaciones de encendido y apagado frecuente es más recomendable utilizar lámparas electrónicas dado que las de bajo consumo reducen su vida con el número de encendidos.
UN CASO PRÁCTICO
Una bombilla tradicional de 100 W (que cuesta unos 0,6 ') proporciona la misma luz que una lámpara de bajo consumo de 20 W (unos 9 ').
Si están encendidas unas 5 horas diarias, su consumo eléctrico a lo largo de un año, proporcionando las dos la misma luz, será:
100 W x 5 horas/día x 365 días = 182.500Wh
20 W x 5 horas/día x 365 días = 36.500 Wh
En el recibo eléctrico nos facturan por kilovatios hora (kWh). Suponiendo que el kWh cuesta 0.1 ':
182.500 Wh x 0,1 '/kWh = 18,2 '
36.500 Wh x 0,1 '/kWh = 3,6 '
En un año la lámpara de bajo consumo nos ahorra 14,6 '.
Por otra parte, las lámparas de bajo consumo duran 8 veces más (8.000 horas) que las bombillas convencionales (1.000 horas). El gasto de ambas en 8.000 horas de vida útil de la lámpara de bajo consumo es:
20 W x 8.000 h. x 0,1 '/kWh = 16 '
100 W x 8.000 h. x 0,1 '/kWh = 80 '
Ahorramos 64 ' a la factura eléctrica además de 4 ' que nos costarían las 7 bombillas convencionales que tendríamos que restituir dado que éstas solo duran 1.000 horas.
Además evitaremos la emisión de media tonelada de CO2 en la atmósfera.
Es importante tener en cuenta que la cantidad de electricidad necesaria para producir luz (vatios) no es lo mismo que la cantidad de luz producida (lúmen).
TIPOS DE LÁMPARAS QUE PODEMOS ENCONTRAR EN LOS MERCADOS
A.- Lámparas incandescentes (bombilla convencional): Son las más económicas pero consumen más y duran menos (1.000 horas).
B.- Lámparas halógenas: Duran más que las anteriores y hacen una luz de calidad especial. Las que llevan transformador consumen hasta un 30 % menos que las bombillas convencionales.
C.- Tubos fluorescentes: Son más caros que las bombillas convencionales pero consumen hasta un 80% menos de electricidad y tienen una duración de entre 8 y 10 veces superior.
D.- Lámparas de bajo consumo: Son pequeños fluorescentes (con sus ventajas de consumo y duración) que se han adaptado a las medidas, formas y soportes para que puedan colocarse en cualquier sitio. En ubicaciones de encendido y apagado frecuente es más recomendable utilizar lámparas electrónicas dado que las de bajo consumo reducen su vida con el número de encendidos.
UN CASO PRÁCTICO
Una bombilla tradicional de 100 W (que cuesta unos 0,6 ') proporciona la misma luz que una lámpara de bajo consumo de 20 W (unos 9 ').
Si están encendidas unas 5 horas diarias, su consumo eléctrico a lo largo de un año, proporcionando las dos la misma luz, será:
100 W x 5 horas/día x 365 días = 182.500Wh
20 W x 5 horas/día x 365 días = 36.500 Wh
En el recibo eléctrico nos facturan por kilovatios hora (kWh). Suponiendo que el kWh cuesta 0.1 ':
182.500 Wh x 0,1 '/kWh = 18,2 '
36.500 Wh x 0,1 '/kWh = 3,6 '
En un año la lámpara de bajo consumo nos ahorra 14,6 '.
Por otra parte, las lámparas de bajo consumo duran 8 veces más (8.000 horas) que las bombillas convencionales (1.000 horas). El gasto de ambas en 8.000 horas de vida útil de la lámpara de bajo consumo es:
20 W x 8.000 h. x 0,1 '/kWh = 16 '
100 W x 8.000 h. x 0,1 '/kWh = 80 '
Ahorramos 64 ' a la factura eléctrica además de 4 ' que nos costarían las 7 bombillas convencionales que tendríamos que restituir dado que éstas solo duran 1.000 horas.
Además evitaremos la emisión de media tonelada de CO2 en la atmósfera.