Las aves del acantilado
Los acantilados marinos son un hábitat muy peculiar que, históricamente, han servido como punto de nidificación y refugio de muchas especies de aves. El cabo de Salou, debido a su alto grado de transformación, así como la continua accesibilidad de embarcaciones y personas en todos sus rincones, ya no conserva condiciones adecuadas para la nidificación de especies que existían antes, como el cormorán moñudo (Phalacrocorax aristotelis), el águila pescadora (Pandion haliaetus) y el halcón peregrino (Falco peregrinus). Actualmente, existe alguna colonia de vencejo pálido (Apus pallidus), paloma zurita (Columba oenas) y se puede observar, en invierno, como el martín pescador (Alcedo atthis) que se apoya para pescar en las aguas tranquilas de las calas, o el cormorán (Phalacrocorax carbo) que descansa. El cabo también es un punto habitual de parada para pequeños fringílidos migrantes, sobre todo cuando hay temporal.